Clara Mallart Lacruz*
Resumen: El artículo presenta la práctica del upcycling o suprarreciclaje, una metodología contemporánea para la transformación social del vestido que nos permite revisar el arte textil y sus aplicaciones, y reflexionar sobre ellos. Esta práctica nos acerca a los objetos que nuestra sociedad desvaloriza, es mayoritariamente explorada y desarrollada por mujeres y contiene un profundo legado histórico. Me propongo mostrar el upcycling como una metodología de estudio e investigación; analizar su potencial como herramienta para la transformación social del textil y del vestido; estudiar el concepto de soberanía como máxima expresión de control de las decisiones (de compra, uso, producción y reflexión), y reflexionar acerca de la herencia de las artes textiles como posible motor para construir un nuevo paradigma de un futuro vivible, de decrecimiento y respeto social, ambientalmente sano y seguro para todos los seres vivos de nuestro planeta.
Palabras clave: upcycling, arte textil, activismo, soberanía textil, metodología
Abstract: The text presents the upcycling practice as a contemporary methodology for textile social transformation. A methodology that allows articulating a review and a reflection about textile art and its applications. A methodology that brings us closer to the objects that our society devalues, mostly explored and developed by woman around the world, and with a huge heritage legacy. It is not a matter here of making this technique known, closely related to artistic recycling, but of proposing it as a study and a research methodology. Using it as a tool for the social transformation of the textile culture and linked through the sovereignty concept, understanding it as the ultimate expression of control over our decisions (shopping, using, producing, and thoughts). The objective is to reflect how through the inheritance of textile arts, a new livable future paradigm can be constructed, based on degrowth, social respect and environmental care, safety and security for all the living beings of our planet.
Keywords: upcycling, textile art, activism, textile sovereignty, methodology
Introducción: el upcycling como metodología
El concepto de upcycling se refiere a la práctica que recupera materiales, objetos, artefactos, etc., que se han convertido en residuos, con el objetivo de revalorizarlos, transformarlos de manera creativa y alargar su vida útil. Se diferencia del concepto de reciclaje porque un objeto suprarreciclado (upcycling) aumenta su calidad o valor respecto al artefacto inicial. En oposición, el concepto de downcycling o infrarreciclaje alude a un proceso de reciclaje que concluye con un artefacto de menor calidad o valor (Salcedo, 2014).
Amy Twigger, diseñadora e investigadora textil, propone utilizar el reciclaje o el arreglo textil como metodología de estudio a través del hacer (Twigger, 2017). El concepto de making as research es su principal herramienta para investigar una tipología de moda a la que denomina folk fashion.[1] La práctica del hacer deja de ser un proceso para convertirse en un método y, a la vez, en objeto de investigación. A partir de estas premisas, propongo utilizar el upcycling como metodología para investigar la transformación del sector textil en su conjunto desde la perspectiva de la soberanía. Se trata de explorar cómo usar los recursos textiles de los que disponemos y gestionarlos con el fin de generar economías locales de desarrollo territorial para los pueblos.
El upcycling es una práctica común entre makers, diseñadores y artistas textiles. A través de él, estos colectivos realizan crítica social y ambiental, cuestionan la sociedad de consumo y se relacionan con otras disciplinas, como la ecología, la sociología o la economía. La técnica se utiliza para crear nuevos objetos a partir de la combinación de otros que han sido desvalorizados y convertidos en residuos. Un ejemplo es el colectivo Makea Tu Vida,[2] actualmente con sede en Fabra i Coats – Fàbrica de Creació. Desde 2006, trabajan a caballo entre el diseño y la ecología, con una filosofía de vida enmarcada en el hacer como medio para aprender, compartir, crear, educar, posicionarse en una actitud crítica, cuestionar y transformar la realidad a través de la colectivización.
El upcycling textil se ha aplicado a lo largo de la historia con técnicas como el quilting, la deconstrucción, la customización, etc., en culturas diversas, entre las más conocidas, la anglosajona, la japonesa y la latina. La recuperación de materiales también se ha dado durante épocas de escasez, de guerra y posguerra, cuando materiales y recursos eran difíciles de conseguir. Esta práctica siempre se ha desarrollado en el ámbito doméstico, ejercida generalmente por mujeres (Bryan, 2017). Relegada al ámbito de las artes y oficios, ha favorecido la unión y la sororidad. Mientras practican upcycling, las mujeres comparten experiencias, traumas y relatos; de este modo, se transmiten conocimientos entre ellas, con el arte textil como medio o voz de sus vivencias, sufrimientos y también reivindicaciones (Garlock, 2016).
De residuo a recurso
El upcycling textil abre el vestido, lo deconstruye y lo transforma, conecta pasado, presente y futuro en un proceso de reconstrucción. Invita al juego y a la reflexión en torno a la memoria histórica (Hernández, 2018). Se toman materiales del pasado, que ya no circulan, y se trabajan con técnicas textiles que les devuelven valor, ya sea estético, económico o ecológico. El artista conecta los tiempos y activa experiencias a través de tramas y urdimbres. Así, proyecta hacia el futuro un vestido configurado de historias pasadas, de la historia como la define Miguel Ángel Hernández: “… algo latente y vivo, que afecta al presente y es la clave de la construcción de un futuro. El tiempo se abre, y el pasado y el futuro se comunican” (Hernández, 2018: 50), y es el textil el medio que articula esta comunicación. Se utilizan materiales en reposo y se toma como referencia un tiempo circular para habitar un espacio y rellenarlo de materialidad contemporánea.
Se propone conseguir esta materialidad por medio del rescate de fibras. El estudio “Trash to cash” (2018), realizado en el marco del Centre for Circular Design,[3] de la University of the Arts London, y conducido por la profesora Rebecca Earley, es un ejemplo del uso del upcycling como metodología de estudio: durante cuatro años se investigó la creación, a partir del upcycling, de una materialidad contemporánea que comprende fibras, modelos y estilos de vida. Sobre la base de la cooperación entre disciplinas y la diversidad territorial conectada en red, se propuso estudiar esta materialidad cíclica, contemporánea y de calidad. Una materialidad segura para la vida y el planeta, confeccionada de fibras textiles que pueden permanecer circulando para su continuo uso sin perder valor ni propiedades. (tropicanabakery.com)
El residuo textil provoca impactos ambientales muy visibles. Su recuperación por parte de colectivos —como Post Industrial Fashion—,[4] marcas —como Ecoalf—[5] y proyectos artísticos —como AltrapoLab—[6] muestra la urgencia con que debemos buscar soluciones a esa problemática.
Imagen 1. Maratón de reciclaje. Evento organizado por AltrapoLab, espacio de cocreación, participación y difusión de la práctica del upcycling y de la problemática textil. Autora: Julieta Pellicer (2018).
Soberanía textil, residuos y upcycling
Iolanda Fresnillo describe la soberanía como “el derecho de los pueblos a definir y decidir cómo quieren que sea la realidad que los rodea” (Fresnillo, 2019). Desde el territorio hasta la economía, pasando por las relaciones políticas y sociales, la soberanía es el derecho a decidir cómo queremos vivir, cómo queremos producir y cómo queremos que se desarrolle la vida, desde el respeto y el cuidado.
El concepto de soberanía nos permite conectar la práctica del upcycling con el territorio. Con soberanía textil, nos referimos a la transformación del sector textil en espacios comunes de cuidado del territorio, de las personas que lo sustentan y viven en él, con propuestas alternativas al consumo textil —como la de Upcyclick—,[7] proyectos de recuperación de especies vinculadas a los lugares —como los de Obrador Xisqueta,[8] Esquellana[9] y DLana—[10] y de antiguas técnicas textiles —como el de Vanessa Barragão—.[11] Todos estos son ejemplos que se están desarrollando hoy en el territorio peninsular. También son prácticas de soberanía textil las que establecen relaciones laborales que hacen posible trasladar la vida al centro y generan procesos de cambio creadores de circuitos al margen del capital (Fresnillo, 2018). Además, la soberanía textil hace referencia al derecho a escoger textiles seguros para la vida y emancipadores para quien los trabaja, pues se sabe poco sobre cómo los químicos relacionados con el textil afectan a las personas.
El upcycling transforma la problemática de los residuos textiles en una oportunidad única para reflexionar sobre la propia gestión de los recursos a nivel territorial. El proyecto Back to Eco [12] es un claro ejemplo de cómo repensar los residuos textiles locales. Desde 2016 han rescatado más de siete mil kilos de pantalones tejanos y, gracias al upcycling y a la creatividad, los han transformado en accesorios de diseño. Así contribuyen a la economía local y a la inserción laboral. Su último logro ha sido cerrar el círculo: han creado el tejido Infinit Denim a partir de sus propios residuos, unos mil doscientos kilos de mermas textiles mezcladas con fibra de celulosa regenerada. El upcycling es capaz de transformar un residuo en un recurso, aunque algunos estudios puntualizan que aún necesitamos más innovación en los procesos de separación de fibras, calidades y metodologías de desmontaje de prendas (Earley, 2018). Sin olvidar que, sobre todo, lo que se necesita es aumentar la concienciación y acabar con el consumo desenfrenando.
Imagen 2. Infografía del modelo circular de Back to Eco. Fuente: Back to Eco.
La construcción de circuitos cortos, como muestra el ejemplo de Back to Eco, así como de redes y nodos repensados para recuperar residuos, ofrece una oportunidad para trabajar con el concepto de soberanía. Recuperar antiguos espacios y conocimientos textiles —como la customización, el quilt y la deconstrucción— y combinar esta herencia con tecnologías desarrolladas (Infinit Denim) y otras aún por explorar, abren posibilidades territoriales y contribuyen a un desarrollo decrecentista y ambientalmente seguro.
Arte textil transformador, activismo, política y ecología en el vestido
El upcycling, nacido como técnica textil creativa de la mano de artesanos, artistas y diseñadores, abre posibilidades para la industria actual, enfrentada a la necesidad de repensarse en esta contemporaneidad. Son muchos los ejemplos que demuestran que es posible posicionarse en un modelo de decrecimiento circular y sostenible para no seguir colapsando el planeta.
Vestirse es un acto político. A través del vestido, expresamos quiénes somos y quiénes queremos ser, nuestras motivaciones y nuestro posicionamiento político. En el arte textil, el upcycling propone alternativas posibles y viables para resignificar el vestido y definir nuestra identidad. El textil nos habla a través de su entrelazado de historias, su recuperación a través de retales de vida supone dar voz a las trabajadoras del sector invisibilizadas, a las mujeres que han cultivado los saberes textiles alrededor del mundo.
Conclusiones
El upcycling ofrece la oportunidad de generar una transformación en el territorio, de sus redes y sus economías, de entender que el textil es una posibilidad y trabajar para que sea un sector socialmente transformador. El arte textil trama conexiones con el territorio y sus recursos, con los pueblos y las personas que lo trabajan, con la cultura y la herencia de saberes. A través del hacer, podemos tejer futuros comunes con espacios de reflexión y crítica, emancipadores para los territorios y sus gentes. A través del hacer, podemos investigar tramas y urdimbres. En nuestras manos está hacerlas crecer hacia lo sostenible y vivible.
Bibliografía
Bryan Wilson, J., 2017. Fray. Art and textile politics. Chicago, University of Chicago Press.
Fresnillo, I., 2019. “I si la resposta fossin les sobiranies?” Crític, 24 de enero. Disponible en: http://www.elcritic.cat/blogs/sentitcritic/2019/01/24/i-si-la-resposta-fossin-les-sobiranies/, consultado el 28 de enero de 2019.
Garlock, L., 2016. “Stories in the cloth: art therapy and narrative textiles.” Art Therapy, 33 (2), pp. 58-66.
Hernández, M. A., 2018. “Contratiempos del arte contemporáneo”. Contranarrativas. Disponible en: https://www.um.es/artlab/index.php/contratiempos-del-arte-contemporaneo/, consultado el 15 de mayo de 2019.
Salcedo, E., 2014. Moda ética para un futuro sostenible. Barcelona, Gustavo Gili.
Twigger, A., 2017. Folk fashion. Understanding homemade clothes. Londres, Tauris.
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* Diseñadora, investigadora y docente. Investigadora del
Máster Universitario de Investigación en Arte y Diseño, Escuela Eina, Barcelona. Profesora de Sostenibilidad en la Escuela Superior de Diseño (IED), Barcelona. Miembro de la Asociación de Moda Sostenible de Barcelona. E-mail: claramallart@gmail.com.
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[1] Folk fashion se refiere a la indumentaria que crean las personas para sí mismas con un conocimiento amateur (Twigger, 2017).
[2] Disponible en: http://www.makeatuvida.net, consultado el 22 de marzo de 2019.
[3] Disponible en: https://circulardesign.org.uk/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[4] Disponible en: http://postindustrialfashion.com/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[5] Disponible en: https://ecoalf.com, consultado el 22 de marzo de 2019.
[6] Disponible en: https://altrapolab.org/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[7] Disponible en: http://www.upcyclick.net/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[8] Disponible en: http://www.xisqueta.cat/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[9] Disponible en: https://www.esquellana.com/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[10] Disponible en: https://www.dlana.es/, consultado el 22 de marzo de 2019.
[11] Disponible en: https://www.vanessabarragao.com/, consultado el 22-03- de marzo de 2019.
[12] Disponible en: http://www.backtoeco.com, consultado el 22 de marzo de 2019.
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